La SEU-UNR llevó a cabo el cierre de sus actividades culturales con una muestra de talleres. Desde fotografías a danzas pasando por pintores, artesanos de la encuadernación o percusionistas confluyendo todo bajo el objetivo de la integración con el arte y con el barrio.
Más allá de conceptos artísticos y más acá de posturas socio-culturales e inclusivas el Centro Cultural UNR (CCUNR) que depende de la Secretaría de Extensión Universitaria dio por concluido este viernes pasado el ciclo 2014 con una muestra de sus talleres en el Comedor Universitario ubicado en Riobamba y Berruti, a escasos metros de donde funciona el CCUNR coordinado por María Borgobello juntamente con Lara Pellegrini y Soledad Cantarini.
Lo que para muchos fue el recordado Bar “Los Amigos”, hoy remodelado y ampliado por la UNR como lugar de encuentro para estudiantes con menús especialmente elaborados con finalidad económica y saludable, sirvió como espacio para un nuevo encuentro ahora entre el arte popular y la inclusión barrial. Porque allí confluyeron las imágenes de Rosario y su gente desde la visión de los nuevos fotógrafos del Taller de Fotografía dirigido por Jorge Olivera que retratan una instantánea de la vida en un momento determinado con el movimiento pleno de chicas que desde muy temprana edad comparten su pasión por la música y la danza árabe.
Fue el sitio en donde los chicos del barrio de la “Siberia” , como se la conoce a la Cuidad Universitaria, pudieron mostrar sus destrezas artísticas y desarrollar parte del espacio lúdico del Taller de Arte para Niños “Igual vida para todos” que coordina la docente Mabel Burel con una muestra de murales y la representación del galopeo de caballos realizados para la ocasión con materiales reciclables, como uno de los murales, y con los que cuatro pequeños de entre 3 a 8 años hicieron bajo el ritmo de cajones peruanos del Taller de Percusión.
Justamente el taller dirigido por Lara Pellegrini y Cristian Ferreira da Camara realizó un especie de ensayo abierto con sus 15 participantes tocando varios temas en el patio del comedor. El sonido característico de cajones peruanos, claves, guiros, bombos, timbales, rayador, pandero o cencerro inundaron el barrio y dieron lugar a la participación de parte de los chicos del taller de Arte para Niños que espontáneamente se unieron al grupo tocando ritmos de batucada demostrando que su saber, el popular puede incorporarse a la fiesta del Centro Cultural Universitario y no solo aportando aquello de lo que aprendieron allí dentro y que también sin duda tiene su impronta personal y colectiva.
También tuvieron sus lugares destacados los talleres de Dibujo y Pintura, Encuadernación, Alebrijes y Construcción de Juguetes que coordinan respectivamente Victoria Rodriguez, Rodrigo Castillo, Paola Scarfó y Pablo Gurrieri. En atriles ubicados sobre uno de los laterales se mostraron obras en dibujo y/o pinturas de los alumnos Ezequiel Hazar, Carola Rondinella y Gisela Valci; mientas que María Julia González aporto al encuentro cultural las artesanías realizadas con la técnica de cartonería y pintadas con colores alegres y vibrantes denominadas “alebrijes”.
En otro sector del comedor se pudieron apreciar las imágenes tomadas por los alumnos del Taller de Fotografía; una instalación que exhibió las piezas fotográficas de Ana Paula Soraiz, Andres Vilosio, Damián Pilatti, Euge Prado, Cati Piraccini, Emiliano Orellana, Mariano Riadi, Guillermo Bataglia, Mile González y Sebastián Solis. Instantáneas de Rosario en su vida cotidiana como vivencias personales recortadas en un instante, con una imagen, bajo el ojo de un sentido y miles de otros mirándolas. Junto a ellas se mostraron los cuadernos de diversos tamaños realizados en el Taller de Encuadernación, con diseños particulares que recreaban un estilo vintage pero que sin dudas otorgaban personalidad a cada uno de ellos creados por Emanuel Marty, Agustina Saadi, Marcela Alemandi, Erika Mack y Maitte Berrenechea.
Otro de los momentos destacados de la tarde-noche en el improvisado Centro Cultural UNR dentro del Comedor Universitario fue la intervención de chicas del Taller de Danzas Árabes que bajo la dirección de su profesora Nélida Baleis realizaron una serie de coreografías con niñas de todas las edades que participan de los distintos cursos, ya sea el inicial, como el intermedio y avanzado. Aquí otra vez la vinculación con el barrio acerca a chicas del lugar que también participan del mismo taller en el CeAC (Centro de Asistencia a la Comunidad) ubicado en el vecino barrio de “República de la Sexta” y que también depende de Programas Comunitarios de la SEU-UNR a estos espacios artísticos.
La actividad del Centro Cultural UNR es un reflejo de lo que en Extensión se entiende por política cultural ya que “permite la relación con la comunidad a través del arte y la cultura, renovando permanentemente el compromiso de la Universidad con el patrimonio cultural de la sociedad” expresó el Secretario de Extensión Universitaria, el ingeniero Juan Manuel Medina. Porque este tipo de iniciativas “brinda la posibilidad de acercar el arte a la comunidad educativa y a los vecinos de su entorno generando y promoviendo espacios de integración e intercambio produciendo nuevos sentidos en forma colectiva a través del arte como herramienta de transformación social” finalizó el funcionario universitario.