CONGRESO DE EXTENSIÓN 2014 – CONFERENCIA: Humberto Tommasino impactó a gran parte de los 400 asistentes de la Conferencia “Avances y desafíos de la Extensión en el Cono Sur” en lo que fue quizá uno de sus últimas intervenciones como Pro-rector de Extensión de la Universidad de la República.
En la actualidad el uruguayo Humberto Tommasino es uno de los referentes más importantes que tiene la función de la Extensión Universitaria en el sistema de educación superior de Latinoamérica y es por ello que no podía estar ausente en el VI Congreso Nacional de Extensión Universitaria, las II Jornadas de Extensión de AUGM y las I Jornadas de Extensión de Latinoamérica y Caribe “La Universidad en diálogo con la Comunidad. Construyendo una institución en contexto” que se llevó a cabo en la ciudad de Rosario del 16 al 19 de septiembre.
“Este encuentro es muy importante porque con él la Extensión puede vivir activamente y transformar las universidades en donde estamos y al mismo tiempo creó espacios para abrimos y generar procesos para contribuir a otras realidades como las de centro América y Caribe” fueron las primeras palabras de Tommasino al incorporarse a la conferencia que compartió junto al chileno Boris González y Sandra de Deus, representante de la extensión brasilaña.
Tommasino prefirió pararse desde la perspectiva de los desafíos que todavía quedan por cumplir para seguir avanzando en esto que se llama Extensión Universitaria. El más importante, según el uruguayo, es “salir de lo que preponderantemente hacemos en nuestras universidades que es fabricar profesionales al servicio de la producción, creamos reproductores de la sociedad capitalista mas que transformadores y justamente es desde la extensión el lugar del sistema universitario que puede aportar a esta transformación de lo que se reproduce”.
La pregunta que pudo sobrevolar el maravilloso Espacio Cultural Universitario con el que cuenta la UNR es: ¿Cómo hacer para lograr este salto de cualidad?; para el funcionario uruguayo “no se puede formar nuevos profesionales al servicio de la transformación si no trabajamos con los sectores subalternos, con la emancipación de los estos que es la inmensa mayoría de nuestro pueblo que sufre la explotación y la dominación”. Así es como Tommasino piensa a la Extensión.
La constitución de un proceso educativo en donde todos podemos enseñan, los universitarios y los sectores populares en un espacio democrático de mutua interacción con una posibilidad mutua de interpelación de saberes ya que “el saber popular nos desafía en cada parte del proceso” apuntó.
En la práctica extensionista, Tommasino describe a sujetos colectivos que deben planifica, actuar y evaluar esos desafíos en formatos de proyectos pero lo interesante es que lo deben hacer ante “la realidad que no es disciplinada, por el contrario la realidad es indisciplinada y por lo tanto es imposible transformarla desde la monodisciplina , implica la interdisciplinariedad y la incorporación de ese saber nuevo” conceptualiza.
La transformación de la realidad indisciplinada implica sin dudas conciliar los tiempos de la Universidad y el de los actores sociales que no siempre coinciden en formatos que van de marzo a diciembre, éstos no tienen nada que ver con las urgencias de los colectivos con los que la Extensión trabaja. Es por esto que Tommasino indica que esta situación “implica pensar el proceso de participación con los actores sociales con los que trabajamos”.
La instauración de un nuevo acto educativo es lo que para estos referentes de la extensión de los últimos años es el gran avance y el desafío para continuarlo y expandirlo. “El partido se juega con lo que hacen los estudiantes, si lo hacen los estudiantes también lo hacen los docentes. Esta modalidad jaquea la pedagogía que se instalo en las universidades que son los espacios predominantes que hay en ella. Jaquea el aprendizaje del acto educativo, no lo destruye pero si lo pone en discusión”.
“Porque en el acto educativo si incorporamos a la extensión implica que haya un actor social, un sujeto educativo integrado que desarma el binomio estudiantes-docentes y lo desacomoda de la posibilidad de una relación unidireccional. En donde hay intemperie del aula que es nuestro espacio fundamental de poder, en el territorio esta relación es otra cosa. No elimina los formatos pedagógicos pero si nos permite pensar en metodologías diferentes que son rupturas de estereotipos de las relaciones del aula” explica Tommasino.
El Pro-Rector en Extensión de la Universidad de la República insistió con el concepto de que “la realidad es indisciplinada” ya que no siempre los contenidos que plantea la Universidad dan respuestas a los problemas reales de la gente. Y por esto esta agenda se pone en cuestión. Otro de los planteos de Tommasino fue sobre “la apropiación de los conocimientos de los agentes con los que trabajamos”. Los proyectos en extensión a veces no tienen en cuenta coproducción de conocimiento, por lo cual la devolución está cuestionada. “En oportunidades no vuelven al territorio a devolverle a estos sectores, son prácticas básicamente extractiva y no vuelven de dar nada y en consecuencia existe una apropiación de los procesos de devolución”.
“La permanencia en terreno, el mantenerse insertos en algunos procesos más permanentes ponen en debate a los proyectos de extensión que hoy tenemos” reformula Tommasino parte de la práctica extensionista que avanzó grandes pasos en los últimos años, proponiendo alianzas estratégicas con los sectores populares y subalternos para pensar juntos que formación crear para los estudiantes que implica además “pensar a la Universidad no con una relación táctica de los proyectos sino con relaciones estratégicas de largo aliento”.
“La otra clave para seguir avanzando y profundizar los cambios son los estudiantes organizados, no es posible una Universidad nueva en una sociedad que no se está repensando pero que la participación estudiantil es el motor fundamental de esa transformación si estas formas de enseñar no son defendida por ellos no habrá Universidad nueva si eso no pasa no pasara aquello de la transformación de la sociedad” finalizó contundente Humberto Tommasino.